El Jarrito: Parte 2.
Apenas empecé esta página el año pasado, había escrito un blog llamado “El jarrito: mala palabra en el café de especialidad”. Aunque los argumentos que doy sobre porque es dificultoso preparar una bebida que cumpla con las expectativas de los clientes en esa taza son ciertos, creo que ahora tengo otra perspectiva en cuanto a que podemos hacer para integral esta medida en nuestro menú y tal vez ayudar a los que vienen a descubrirlo a no tener un choque tan grande en el momento de pedir su café.
La capacidad de un jarrito es de aproximadamente 130 cc. Esto hace que sea una medida no tan grande ni tan chica. Aquel que pide un café en jarrito puede estar buscando una experiencia un poco más prolongada que un espresso, pero sin la necesidad de tomarse los 200 cc o más que tiene una taza mediana donde generalmente se sirve un americano.
Creo que se subestima el efecto negativo que tiene en un negocio cuando, repetidamente, no podemos servirles a nuestros clientes lo que piden. Es una fricción negativa que hace que aquel que se arriesga a entrar en nuestro café y probar algo nuevo, ya desde un principio tenga dificultad para maniobrar en el menú de una cafetería de especialidad.
Las soluciones que daba en el primer blog era, primero, simplemente tener el jarrito como una taza disponible, y vender lo que sería un americano hecho en esa taza. Hecho con uno o dos shots de espresso según el cliente lo desee. La segunda era ofrecer a los clientes que buscan esta medida, probar el café filtrado en ella. Es probable que la mayoría se lleve una gran sorpresa al probar el potencial que tiene el sabor de un café filtrado. Y para agilizar la venta, podemos hacer que el filtrado que se ofrezca en estas tazas, o cuando se pide un americano, sea hecho por Aeropress, la cual toma menos tiempo que un método de goteo.
Aclaro que acá me refiero a preparar café sin leche en un jarrito, en el caso de que lo que el cliente desee sea un cortado en jarrito o algo mas liviano, no veo razón alguna por la cual no se puede preparar usando uno o dos shots de espresso y leche texturizada. Básicamente versiones más pequeñas de un flat o un cappuccino.
Como les digo en todos los post, creo que siempre debemos buscar incluir más gente en nuestro mundo, para que todos podamos disfrutar de un mejor café y hacer crecer nuestro sector de la gastronomía.